Para preparar un delicioso banquete de primavera solo hay que salir fuera en una mañana de sol y escuchar la explosión de la naturaleza, percibir la sinfonía de aromas que embriagan los sentidos y plasmar todas estas sensaciones en un plato...
En primavera hay que cocinar con la ventana de la cocina abierta para contagiarse de la increíble belleza que la creación nos obsequia cada estación…
La cocina de primavera debe ser así, como la propia naturaleza, exultante, llena de aromas chocantes y a la vez armónicos, con mil colores de cuya combinación apenas hay que preocuparse, porque todo es una fiesta.
Pero ese debe ser el resultado, una fiesta, un milagro esperanzador...
Para que una verdura llegue a la mesa con toda la elegancia, frescura y perfume que la caracteriza en la huerta, esta debe ser mimada y respetada en cada fase de su preparación cuidando sus curvas, su crecimiento y cortando en ese sentido.
…de aliños ligeros y frescos, el vinagre debe aparecer solo como una sospecha en cada ensalada. Las especias… como el rocío en la mañana, los sabores de las verduras deben aportar a cada plato toda su potencia aromática y en muchos casos podríamos considerarles como una especia en sí.
...Y también, la música que esté presente, pues definitivamente cocinaremos mejor y más alegres allí donde haya música...
¡¡¡Que gusto!!!
A ustedes, habitantes del hemisferio norte...
¡¡¡FELIZ PRIMAVERA PARA TODOS!!!
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